Hay abusos gruesos y hay abusos encubiertos que tienen que ver con la crianza y que pasan desapercibidos para el observador no-profesional. En todas las familias existe un reparto de papeles asimétrico donde cada hijo ha de asumir el suyo, sin derecho a reescribir el guión, asi hablamos de tres grandes grupos de roles: el chivo expiatorio, el niño de oro y los monos voladores.
Vale la pena oir a Rachel -una superviviente de una familia narcisista- en esta descripción.